Todo pasa y todo queda (experiencia en Makinostra)

IMG_8811

Todo pasa y todo queda

La Carabela me ha llevado a sitios desconocidos. Me ha dado oportunidades emocionantes de conocer gentes y lugares. Me he divertido, he tranquileado. He aprendido sobre las personas y sobre el mundo, y me ha acercado a la naturaleza y a su Creador. He compartido con mucha gente y me he llegado a gustar. La Harley-Davidson Street XG750 ha sido una puerta a lo desconocido, ha sido la puerta tras la que resulta que estaban los regalos de los Reyes Magos, y esa puerta la he abierto tantas veces como ocasiones he tenido de rodar. En total han sido 23.000 km de emoción con los que he aprendido a sonar a mí mismo. Y he encontrado mis límites, que han resultado estar muy cercanos.

Pero lo nuestro es pasar haciendo caminos

Todo tiene su momento. Las etapas van pasando y las cosas van cambiando en este devenir que es nuestra vida. Ahora le toca el turno a la Cabezota. La Cabezota es una Harley-Davidson Sportster 883 de 2016 que he comprado en Makinostra. Seguramente tenga menos potencia, seguramente sea más tosca y más ruidosa, seguramente es más pesada… pero algo me dice que ahora me toca esa. Pasaré entre vosotros, queridos lectores, haciendo camino con la Iron. No sé a dónde voy a ir, pero voy a ir. Iré más despacio, tranquileando como a mí me gusta, a algún lugar que ya conozca o a algún lugar que no conozca. No me va a importar eso. Tampoco me va a importar si voy solo o si voy con gente. Me gusta ir solo y me gusta ir con mis amigos, y con gente que no conozco. Me gusta rodar por ahí.

Caminos sobre la mar

En Madrid hay dos concesionarios de Harley-Davidson. Uno se llama Capital y otro se llama Makinostra. Y la compra de la que ha resultado ser la Cabezota la he hecho en Makinostra. He pasado de la inflexibilidad a la amabilidad. De un las cosas son así a un vamos a pensar juntos cómo lo hacemos. De un quiero tu dinero a un vas a pagar la moto pero por mis cojones que te vas a ir encantado de la vida. De un voy a preguntar a mi jefe a un espera que te va a atender el jefe.

Me ha encantado la experiencia de hacer caminos sobre la mar de la mano de Víctor y de Sergio. La verdad es que ha habido un momento en el que he dudado de si estaba en un comercio o en una casa particular: la gente entraba, se saludaban, volaban unas directísimas indirectas ante las que yo tenía que agachar la cabeza para que no me dieran. No sé. Bueno, sí sé. Es un comercio, una tienda, un concesionario puesto al servicio de los intereses de la propiedad y de la propia marca… pero también está puesto al servicio de los intereses de los clientes. Un lugar en el que miran de reojo, todo el tiempo, el interés del cliente.

Me ha parecido que en este concesionario tienen claro que sin el cliente no quieren estar. Yo creo que ellos saben sobradamente que quien quiera una Harley-Davidson en Madrid no tiene más que dos opciones, y me parece que, aun sabiendo esta circunstancia, ellos han optado por trabajar, por ser, por hacer… como si eso no fuese así. Y me parece que el responsable de eso es un psicólogo valenciano.

Anuncio publicitario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Un sitio web WordPress.com.

Subir ↑

A %d blogueros les gusta esto: